
la poesía la compartió – aria white – «un pedacito de mi»
Cristina González – Aria White
Escritora, blogger y universitaria.
¿Qué decir?. El Wine&Think ha sido una experiencia que anhelaba desde hacía tiempo y aunque en el fondo temía no encajar, ser demasiado joven e inmadura, no ha sido así. He disfrutado la velada con gusto, escuchando, preguntando, hablando y sobretodo: aprendiendo. Realmente se me hizo corto, me hubiera gustado poder compartir más, ya que es algo que me entusiasma y no siempre es fácil. Esa noche, pude recitar -un poco nerviosa- dos poemas; Libertad ensoñada y Permíteme, que fueron muy bien acogidos, y que tengo publicados en mi Blog: Las historias y poemas de Aria White.
Me gustaría agradecer a todos los conferenciantes por haberme escuchado con paciencia en todo momento, brindándome una comprensión que necesitaba para poder disfrutar; y en especial, quiero agradecer a los organizadores Tomás y Lola, por haber creado este tipo de encuentro tan original y escaso hoy en día, ya que lo normal es que se junte gente con las mismas ambiciones y gustos, no al contrario.
El lugar, el Club de vinos Los Sarmientos, es un sitio que ya conocía, diferente a mis gustos usuales, pero sumamente acogedor. Sin embargo, para mi destacan dos cosas muy importantes en él: la buena comida y un servicio excelente, atento y cercano, que te permite sentirte aún más a gusto. Es una pena que no haya podido degustar el vino, por lo que sí es posible, en un futuro me gustaría repetir para poder hacerlo. No quiero privarme de nuevo de una parte importante de la velada.
En general, ha sido una experiencia enriquecedora, casi perfecta, pero corta y a pesar del famoso dicho «lo bueno breve, dos veces bueno», me he quedado con demasiadas ganas de más. Ahora solo puedo pasear por mi Granada, buscando nuevos momentos mágicos en esta ciudad que me permitan volver a compartir un pedacito de mí.
POEMAS:
Libertad ensoñada
Escuché el aullido de un lobo,
mientras el crepitar de las llamas,
me indujo al
ensueño.
Ya allí, lejos de mí misma
y más cerca que nunca
ensoñé con mil y más
aullidos.
Perdida, cegada,
encontrada y otra vez
perdida.
No me arrebataron
sino me despellejaron
de todo rastro humano
que había en mí.
Exhale un suspiro y alcé el vuelo.
Libertad.
Permíteme
arrebatarte tu cordura
con besos de canela y perfume de vainilla.
Permíteme, acurrucarme en tus sueños,
y atraparte en los míos, que te ansían…
Permíteme, ser tu amada
en la linde entre el cielo y el infierno.
Permanezcamos en este ensueño,
donde la soledad, es solo un mito…